La Conquista
Este capítulo, sin duda, se ha convertido en mi favorito hasta el momento, al inicio empezó arrastrando una sensación amarga por lo ocurrido en el capítulo anterior. Lo que más me ha impactado es cómo el señor Portugués, que antes parecía un enemigo para Zezé, termina convirtiéndose en alguien a quien querer. Es impresionante cómo cambia la percepción de este personaje.
Al inicio del capítulo, vemos a un Zezé totalmente distinto, avergonzado, lleno de temor, evitando pasar por el lugar donde sufrió aquella humillación que hasta pensó en crecer y matar a ese viejo , hay un cambio notorio en su comportamiento. Pero como Zezé no puede evitar ser él mismo, una nueva travesura lo lleva a lesionarse gravemente el pie. Lo que más me sorprende es la fortaleza que demuestra frente al dolor; no cualquier niño tendría esa capacidad de aguantar un dolor tan agudo sin romperse en llanto. Es como si estuviera acostumbrado al sufrimiento físico, que ya en si es su día a día
Por dicha, su hermana Gloria llega para auxiliarlo. Esa escena en la que ella lo acompaña y muestra un rayo de ternura para Zezé que muchas veces se siente desprotegido. Cuando él le dice que siente que no lo quieren, es como si eso es lo que el mundo le da a entender. Es una confesión profunda, una expresión directa del abandono emocional que siente. Zezé no solo cree que no lo aman, sino que interpreta que los demás se desquitan con él, que lo usan como un saco de boxeo para explotar sus frustraciones.
El momento en que Zezé empieza a confiar en él, a conversar, a sentirse acompañado de verdad, es precioso. Es como si por fin encontrara a un adulto que lo ve, que lo escucha, y que le ofrece un cariño distinto, no impuesto ni por obligación familiar, sino por elección. El señor Portugués se convierte en una figura inesperada de afecto y comprensión, y eso le da un nuevo respiro emocional a Zezé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario